miércoles, 23 de febrero de 2011

Lo que un foráneo vino a buscar a Tierra del Fuego

Nuestro hogar no sólo tuvo aroma a te inglés en este verano, también estuvo presente la singular peperina cordobesa de la mano de nuestro amigo el profe Carlos Nieto quien nos deleitó con su visita por Tierra del Fuego, aquí le presentamos un video de esta gran persona disfrutando como no podría ser de otra manera del kayak y el mar fueguino, Gracias Carlos por tu visita.

Profe Nieto Tierra del Fuego

martes, 22 de febrero de 2011

Friends / Amigos


“Marcelo & Mónica” bajo el título de logística y soporte de la expedición de Justine Curgenven, raro era vernos en ese plano, solo queríamos hacerle la gauchada a ese personaje del kayakismo internacional, esa marca registrada en el mundo del kayak llamada JUSTINE y “alguien” más que venía con ella a nuestra querida isla.


Es así que gestionamos permisos y dimos a conocer oficialmente su expedición ante Prefectura, esto era sólo una cuestión de trámites y cumplir con requisitos.

El segundo paso sería recibirlos en Río Grande, tenerlos como máximo dos días en casa y después estar atento por las dudas si necesitaran algo.

Pero no, el destino tenía preparado otra cosa totalmente diferente, no llegamos a ver lo que habíamos imaginado; dos kayakistas de elite en plena expedición pasando por Río Grande en un abrir y cerrar de ojos.

Es aquí la mejor parte para nosotros, más allá de que toda su estadía en nuestra ciudad para ellos haya sido forzada, la vivieron de una manera muy agradable al punto de llegar a conocernos y apreciarlos como verdaderos amigos.

JUSTINE CURGENVEN, se transformó en la jastine y el compañero era ni más ni menos que Barry, el personaje que se robó la película y el corazón de todos; con el tiempo el kayak no fue el primer y único tema de conversación, pudimos conocer sus vidas y su cultura de una forma muy agradable y divertida, riéndonos unos y otros fuimos aprendiendo día a día cada cosa en particular de los que convivimos estos casi 30 días.


A pesar de que tuvieron momentos y decisiones duras y nos vimos envueltos en ellos, pudimos manejar la situación dando el espacio para cada momento, todavía me duele la imagen de cuando los fuimos a buscar a Punta María, sabiendo que ese era el fin del viaje, ellos nos miraban con la mejor cara tratando de minimizar esa amargura que seguramente los comía por dentro, ayer pasé por el mismo lugar y no tuve la mejor impresión.

Pero como pronto estarán por aca esto sólo quedará como una anécdota, lo que aquí importa y resalto es que conocimos dos personas excepcionales, ella hace las mejores tortas de limón y el… bueno sus galletas no eran tan malas pero es el individuo que hace brillar momentos opacos, se nota sus buenos sentimientos con cada gesto que tuvo.


No voy hablar de los kayakistas porque para eso están las revistas y videos, hablo de las personas que recibimos en casa, los británicos que cargamos con “la mano de Dios” y con quienes hablamos entre tantas cosas del conflicto entre ambas naciones y como vivimos un guerra absurda, simplemente hablo de Justine y Barry unos amigos que conocimos gracias al kayak !

Marcelo

jueves, 17 de febrero de 2011

UNA TIERRA FRIA EN CONTEXTO Y LLENA DE FUEGO POR DENTRO

El indígena no esperaba el avance e ingreso de las naves extranjeras que empezaron a surcar estas aguas por los años 1500 al 1600. Sumido en su naturaleza fueguina no llegaba a comprender del todo por qué ocurría lo que veían sus ojos. Sin embargo, siempre se prestaba a establecer contacto. A compartir a su manera. Hacer intercambio. Disfrutar las diferencias.


En una tierra de por sí hostil y difícil. Se propiciaban encuentros de todo tipo. Entre seres extraños y de diferentes culturas. Totalmente desconocidos uno para el otro.

Ha pasado mucho el tiempo, han cambiado algunas cosas. Algunos ya no están y otros presenciamos nuevos viajes, nuevos ingresos.

La tierra de la aventura, tan predominantemente salvaje como para esquivar la tecnología del nuevo milenio. Aún parece tener la última palabra en sus dominios. Y es más que nunca caprichosamente adictiva.


Aún recibe visitantes en busca de horizontes nuevos. Aún el hombre sueña con decodificar su hostilidad para definirla aún más o definirse a sí mismo.

Seducido irremediablemente por su salvajismo y su naturaleza áspera. Busca ser sacudido y maltratado por esta tierra de característica no hospitalaria.

La soledad de sus áreas más remotas e inexploradas. La crudeza de su extrema humedad o el sufrimiento de los vientos implacables de la estepa oriental.

Soledad. Aislamiento. Frío. Pérdida del control ejercido. Castigo. Lucha. Estoicismo. Paciencia. Aventura.

Aventura en todo su sentido y naturaleza.

Los nuevos visitantes me hacen sentir nuevamente en un viaje al pasado. Me ayudan a reflexionar.

Nuevamente no todo es tan diferente. Aunque pudiera parecerlo.

Antes eran canoas de corteza de coihue. Hoy son kayaks de fibra estilizados, rápidos, perfectas máquinas de la navegación en el mar.

Antes estaban semi desnudos y atrasados en lo que se entendía como el adelanto tecnológico. Hoy son navegantes de elite, ciudadanos de un mundo diferente en miles de aspectos al nuestro.

No esperábamos que comenzaran a venir seducidos por nuestra tierra cruda y áspera. Y han conectado con ella. La han elegido para medirse y descubrirla.

Como en el pasado.

Tal vez sea una misma energía la que domina los destinos del fueguino y el extranjero. Tal vez todo finalmente sea una misma cosa.

Se puede compartir. A través de los intereses en común, como la isla y el kayak. Y a través de las diferencias también.

La diversidad de Tierra del Fuego sin duda admite tal diversidad humana. Podemos convivir en esa diversidad sin otro motivo que el de socializar como en el pasado pues todos entendemos que somos lo mismo. La misma esencia.


En este caso tal vez la excusa fuera el Kayak.


Tal vez sea el mágico balance de este lugar, la crudeza de su lado geográfico y un calor que yace dentro esperando ser descubierto.



Moni