domingo, 19 de junio de 2011

SEGURIDAD Y RESCATE


  Los rescates llevados a cabo en el mar tienen los mismos problemas inherentes a los rescates en aguas blancas. Los de mar tienen la adicional complicación de no tener acceso en el lugar a bancos laterales y además que hay un gran potencial de que las cosas se pongan “muy mal de verdad”. Sin embargo, la teoría de todos los escenarios de rescate es la misma, sea en el mar o en aguas blancas o dentro de un edificio colapsando.

PROTEGER:

1.       VOS MISMO
2.       LOS RESTANTES MIEMBROS DEL GRUPO
3.       LA VICTIMA

Los rescates son una importante destreza o habilidad para un kayakista competente, si sos vos el que está rescatando o si sos rescatado, no es lo que interesa. Lo que interesa es la forma en que estos rescates son llevados a cabo, la velocidad en la cual el nadador es puesto de vuelta dentro de su bote y los inmediatos efectos posteriores de la situación. El nadador debe permanecer en contacto con su kayak y pala hasta que el rescatista llegue; lo que ocurre después de eso depende casi enteramente del rescatista. El rescate mas rápido no involucra a la víctima moviendo su kayak hacia el rescatista, si no sólo mantener agarrado al kayak. Cuando se está moviendo en el agua, siempre mantener el agarre en las líneas de cubierta. Si hubiera una mejor localización donde estar, sería en el frente de tu kayak ya que es aquí donde el rescatista arribará y vos podés pasarle tu kayak mientras te dirigís hacia al del rescatista. 

Casi siempre se pasa por alto el decir que, a través de la práctica de una variedad de rescates en diferentes condiciones controladas tu arsenal se incrementará, asegurándote el estar por lejos mucho más capaz que si sólo has probado un tipo de rescate.


INFORMACION IMPORTANTE PARA TODOS LOS RESCATISTAS

  • Cerciorate del estado mental del nadador: hasta que demuestren lo contrario, tratando de  aparentar estar calmos y contestar preguntas con cierta lógica, asumí que ellos van  agarrarse de vos e intentar trepar sobre tu kayak. Asumí que cada víctima está intentando llevarte al agua junto con ellos.
  • Si en el hacerlo estás comprometido, no lo hagas: es mejor tener una persona  en problemas que dos. Solo después de que te hayas asegurado que están calmos y en control deberías hacer contacto.
  • FRAGIL MANIPULAR CON CUIDADO!: deslizar – NO levantar-un kayak de mar completamente cargado puede pesar 200 kilos antes de cargar algo de agua en el cockpit. No te dobles, o encurves hacia un lado, mantene tu columna en línea como si fuera vista desde atrás, es una estructura muy fuerte en esta posición, pero débil apenas hay una desviación lateral.
  • Usa a la víctima para ayudar si es posible: asegurate que sostiene su kayak y pala, hablale, dale instrucciones, engatusalo, pelealo, lo que sea necesario para hacer que el rescate vaya sin problemas.
  • El rescatista tiene el control absoluto: el rescatista comanda respecto de la víctima. El nadador debe escuchar y reaccionar a las instrucciones tan pronto como se dan, aún anticipando lo que el rescatista podría pedir que se haga.


AUTO RESCATE- Self Rescue

Con la excepción de un roll a prueba de bombas la mayoría de estos rescates caen dentro de las categorías de los trucos del equipo, a veces útiles para convencerte a vos mismo que vas a estar bien pase lo que pase.

Desafortunadamente las condiciones que te pusieron en el agua en primer lugar van a estar allí aún cuando estés de vuelta en tu kayak, con el inconveniente agregado de tener el área del cockpit llena de agua. Como con cualquier otro escenario de rescate, el practicar en diferentes condiciones de mar te va a permitir hacer una elección informada de que método es el que funciona para vos cuando lo necesitás.

ROLL

Cuando se trata de rolar un kayak de mar hay una pequeña diferencia con respecto a otra embarcación; las cosas simplemente necesitan suceder más lentamente. Debido al volumen general del kayak y también a la flotación cerca de los extremos, un típico kayak de mar va a tender a acostarse sobre su lado en vez de quedar invertido completamente. Podés en cierto punto reducir este problema asegurándote de pegar tu mentón en tu pecho y llevar tu cabeza tan cerca de la cubierta delantera como puedas ponerla.

También generalmente cada vez que vuelques y no des bien toda la vuelta va a ser de tu lado flaco, si vos podés rolar de ambos lados no habría problema. Si tenés un monton de flotación en tu cuerpo superior debido a aire atrapado en tu chaqueta, hay una alta posibilidad que cuando trates de prepararte inicialmente para el roll el kayak va a empezar a salir en el lado malo otra vez. Este es un momento en el que pienso que un soporte o apoyo sculling sería útil.
Con el sculling estás moviendo tu kayak bajo el agua para ponerlo en una posición inicial de roll.


REINGRESO Y ROLL

Probablemente el más usado y seguro método de llevar a cabo un autorescate. Requiere práctica sin embargo, y ésta debería incluir aguas difíciles. Comenzá en el agua al lado de tu kayak. Sostene tu pala y la parte del cockpit lo más cerca tuyo en tu mano izquierda. Acóstate en el agua de espalda y comenzá a meter tus pies dentro del cockpit mientras hacés esto mové el kayak sobre su lado. Ahora sostené el cockpit con una mano de cada lado, lleva tus nalgas hasta dentro del asiento. Te vas a invertir completamente en este punto. Asegurándote que estás trabado en las musleras y apoya pies lleva a cabo un roll lento; habrá una cantidad sustancial de agua en el cockpit que afectará tu estabilidad, asi que retirate a un lugar donde puedas vaciar tu kayak y volver a colocar tu pollera.


TREPAR A CUBIERTA TRASERA:

Subir a la cubierta de tu kayak desde el agua sin asistencia puede ser posible. Mantenete cerca del área del cockpit donde el kayak es más ancho. Empújate fuera del agua y sobre la cubierta de atrás en un movimiento. Esto es llevado a cabo mejor hundiéndote en el agua luego empujando y pateando al mismo tiempo. Empuja hasta que puedas acostarte sobre la cubierta. Manteniendo tu peso bajo y ancho, ésta es una posición razonablemente estable y debería ser posible ahora arrastrarte hacia adelante hasta que puedas sentarte en el asiento. Cuando estés en el asiento trae tus piernas una a la vez hacia adentro.



FLOTADOR DE PALA:

El auto rescate con paddle float parece una buena idea y funciona en condiciones calmas. Pero aquellos que pueden realizar este truco en aguas turbulentas a menudo son capaces de trepar en la cubierta trasera con mejor balance.
 Comenzá girando hacia arriba tu kayak, coloca el paddle float sobre una hoja, si es inflable dale aire. Coloca la pala a través de la cubierta trasera detrás del cockpit y, sosteniéndola, empújate fuera del agua hasta que estés acostado mirando hacia abajo la pala y la cubierta. Deberías estar lo suficientemente lejos atrás en la cubierta para deslizar tus pies dentro del cockpit mientras permaneces con la cara hacia abajo. Una vez en el cockpit girá hasta que estés sentado en la posición de remo. Quita el flotador y colocalo nuevamente en un lugar donde se encuentre disponible para un próximo uso.


RESCATE EN SOLITARIO Solo Rescue

Por definición, estos rescates involucran una rescatista, además de la víctima volcada. Normalmente estos toman la forma de un rescate X (el viejo estándar) o uno similar.


RESCATE ESQUIMAL:

Considerada la segunda línea de defensa después de un roll pero antes de tener una salida del kayak (wet exit). El rescate esquimal básico involucra sostener el aire, permanecer en tu kayak dado vuelta,  atraer la atención golpeando ruidosamente el casco del kayak, moviendo tus brazos hacia los lados del kayak en un arco ancho, esperando que tus compañeros de remada puedan maniobrar sus kayaks  bien cerca tuyo como para que te permita agarrar alguna parte de su kayak, pala o cuerpo. Ahora imaginá esto si estás remando en un mar con rompiente o fuertes corrientes de marea, no siempre es una buena opción.

Cuando estés invertido, golpea ruidosamente el casco de tu kayak, luego con tus pulgares apuntando hacia el casco, barré con tus manos los lados del kayak en un arco amplio. Abrí tus ojos para ver llegar a tu rescatista de un lado u otro. Esperá hasta que sientas el impacto de su kayak con el tuyo. Deberías ahora estar muy cerca para hacer contacto con tu mano. Cuando te agarres del kayak del rescatista, empuja hacia abajo sobre éste usando un golpe de cadera para recuperarte, asegurándote que tenés siempre el kayak de tu rescatista agarrado. Si el rescatista se acerca a tu kayak volcado en un ángulo, hay más objetivo del que asirse. Además el rescatista no tiene que ser súper preciso cuando posicione el kayak.


3 aproximaciones:
Proa a proa- el rescatista se acerca desde el frente y cuando alcanza tu proa se agarra de ésta. Esto coloca su proa en una posición donde vos fácilmente podrás agarrarte de ella. Tirá hacia arriba como con los otros métodos.

Presentación del extremo del kayak- la más simple de realizar pero no la más fácil para alinearse. La proa del kayak del rescatista viene en un ángulo desde el frente, asegurando que éste hace contacto con tu bote antes de alcanzar o tocar tus manos. El golpe te advierte o avisa.

Presentación de la pala- el kayak del rescatista viene a lo largo (paralelo) , su pala es colocada sobre tu casco dado vuelta y tu mano (entre los kayaks) es guiada hacia la pértiga de la pala. Tu rescatista puede estabilizarte mientras vos tironeás para salir fuera del agua.

Tal vez una buena forma de mirar la ejecución de un rescate esquimal sería considerar el escenario de los “y si…”. Imaginate que te estás acercando desde la proa, vos como rescatista te preparaste o  armaste para el método proa a proa y ya casi estás allí, entonces una ola golpea tu mano de la cubierta del otro kayak,  justo cuando estas por asirla. Si hubieras puesto tu kayak en ángulo más hacia el casco volcado, tu proa lo hubiera golpeado justo en el lugar correcto para un rescate de proa.
Si perdés esta posición entonces tu impulso te va a llevar paralelo al kayak volcado y tu pala puede ser llevada cruzada como en la posición del rescate con pala.


RESCATE FINAL

Acercate a la proa del kayak volcado y pone  tu pala en una posición restringida que la contenga cuando tengas un agarre firme del kayak. Asegurate que tus dos manos estén en el bote con la más cercana en algún punto de la quilla. Esto te permite usar la flotación de este bote como soporte, mientras colocas tu otra mano en posición en la proa. Usando ambas manos girá el kayak hacia arriba, luego agarrando el cabo de vida o la agarradera en el extremo, inclínate lejos del bote que estás rescatando hasta que tu kayak esté completamente de lado, mientras tironeas el otro kayak sobre el tuyo. Este movimiento va a girar el kayak que estás rescatando de modo que el agua pueda drenar desde el cockpit. (Otra opción es deslizar el kayak hacia el tuyo hasta que alcances el compartimento estanco frontal. Gíralo boca abajo dentro de la curva de tu brazo que está más cerca del cockpit del kayak rescatado). Cuando el agua ha sido drenada, girá el kayak hacia arriba mientras te volvés a sentar en la posición de erguido. Pasa la proa bajo tu axila hasta que alcances la parte frontal del cockpit. Manteniendo tu cabeza baja, agarra las líneas de cubierta de ambos lados del bote y tene la línea central del kayak de la víctima alineada con tu axila, con tu kayak escorado. Usando los músculos de tu estómago ejecuta un ejercicio abdominal, llevando bien tus rodillas hacia el pecho, esto asegurará que ambos kayaks permanezcan juntos. En esta posición vas a poder ayudar a la víctima si se requiere y luego asistirla/o para reubicar su pollera.


METODOS DE INGRESO:

Reingreso empujando hacia arriba: empuja cerca del cockpit con un kayak en cualquiera de los lados. Si dejas que tu cuerpo se hunda en el agua primero vas a permitir que la flotación por si sola te ayude a elevarte mientras trata de sacarte a la superficie. Cuando tus brazos están derechos, pivotea hasta que puedas sentarte en tu propio cockpit. Luego ya es sólo un tema de poner tus pies dentro y colocar tu pollera.

Reingreso tirado hacia atrás: acostate entre el kayak de tu rescatista y el tuyo mirándolos. Engancha cada brazo y pie sobre cada kayak, luego haciendo palanca con tus brazos y piernas empuja ambos kayaks juntos debajo tuyo. Sentate y trae tus piernas dentro del cockpit. Este método no es muy fácil y presenta el riesgo de que los kayaks colapsen si hay algún tipo de movimiento de olas.

Pierna por encima desde afuera: mira hacia la parte de atrás de tu kayak, sosteniéndote detrás del cockpit , engancha tu pierna más cercana al kayak dentro del cockpit. Si ahora vos  enderezás tu pierna mientras empujás con tus brazos vas a encontrar que estás fuera del agua y casi completamente en el kayak. Simplemente desliza tu pierna dentro, gira y colocate la pollera.

Reingreso Scoop: (asistiendo a un palista herido). Tene al palista incapacitado sosteniendo su kayak, al que has puesto de lado con el área del cockpit lejos tuyo. Asistí a la víctima para poner sus piernas y nalgas dentro del colckpit (o giralo para que su espalda mire hacia el cockpit y maniobre sus nalgas dentro del cockpit). Agarrá firmemente el chaleco de flotación y tironéalo hacia vos, al mismo tiempo empujando su kayak hacia abajo en el agua. El kayak va a balancearse de vuelta hacia el agua y te va a ayudar a elevarte. Recordá sostener a la víctima cuando la tengas ya erguida en su kayak.





RESCATES EN GRUPO:

Utilizados donde una persona más débil ha empezado ya el rescate pero no lo está manejando bastante bien, con soporte o apoyo para el rescatista o la víctima. Por ejemplo, donde la víctima y el rescatista están siendo barridos hacia rocas u otra costa no hospitalaria. En este caso un rescate en remolque funciona bien, asumiendo que algún mimebro del grupo tiene un sistema de remolque.

Considera como manejarías una situación donde un miembro del equipo estaría incapaz de remar debido a un accidente o enfermedad. Hay muchos modelos que podés observar para que te ayuden a lidiar con cualquier incidente. El siguiente es el modelo de cómo encaro una situación que se está desarrollando:

·          C    Reuní tus ideas.
·          A   Evaluá la situación completa y formula un plan con respaldo.
·          M  Manejate primero vos mismo, luego el resto del grupo, entonces la víctima.
·          E   Ejecuta plan A.
·          R   Revisa el incidente en contexto y como un todo.
·          A   Evaluá la efectividad del plan A y modificalo de acuerdo a cómo evolucione la situación.

Creo que es importante ver la situación como un continuo, sin final y sin un punto de inicio predeterminado. La razón para esto es que deberías estar evaluando la situación y manejando a cada uno en todo momento, fuera de si hay un incidente o no, o de si sos el líder el grupo o no.  
Me gusta usar el termino cámera (cámara) porque si fuera posible filmar todo el evento  desde antes de que se convirtió en un incidente  hasta cada que cada uno volvió a casa seguro, habría una gran cantidad de lecciones para aprender de éste.

Cuanto más complejo el ambiente, más difícil va a ser el rescate. Puede no haber lugares para hacer tierra disponibles como por ejemplo cuando se está a lo largo de acantilados. Podrías ser forzado mar adentro a fuertes corrientes de marea o viento desfavorable. Podrías incluso estar en un área de mucho tráfico de barcos y ser casi completamente invisible a sus radares.


PARA QUE TUS RESCATES FUNCIONEN ELLOS REQUIEREN SER PRACTICADOS EN FORMA REGULAR EN TODAS LAS CONDICIONES”.    


      

miércoles, 8 de junio de 2011

Buscando el calce en tu kayak


Mucha gente compra kayaks que son demasiado grandes para ellos, esto puede ser en base a la falsa creencia de que “es para expedicionar”. La mayoría del tiempo tu kayak va a estar casi vacío con el equipo de día o de fin de semana y la salida ocasional de una o dos semanas  en el año.
Un kayak vacío se asentará más alto en el agua que uno completamente cargado. Similarmente un kayak más grande se va a asentar más alto sobre el agua y será afectado más por el efecto del viento que uno más pequeño. Si tenés que considerar colocarle lastre a tu kayak para la mayor parte de tiempo en el agua, entonces éste es demasiado grande para vos. Esto va a instalar una restricción en tu remada.

Chequea la posición de la parte alta de tu pelvis en relación al borde del cockpit . Si está por debajo entonces el bote probablemente es demasiado grande para vos, escorar será difícil, la remada hacia adelante será menos eficiente y vas a golpear tus codos en el borde del cockpit más veces de las que puedas contar. También vas a terminar remando con tus hombros encogidos, usando la mayoría de los músculos del cuerpo superior sólo para sentarte en el kayak antes de que inclusive comiences a remar. Si tu pelvis está sobre el borde del cockpit, entonces el bote se va a comportar con la intención de su diseñador. Vas a poder escorar tan lejos como tu flexibilidad lo permita.

Obviamente cualquier tipo de relleno puede ser añadido en la parte superior del asiento, esto va a traer tu pelvis a una mejor altura pero también reducirá un poco la estabilidad de tu bote. Otro efecto para levantar la altura de tu asiento es bajar efectivamente la zona de apoyos de las rodillas o las musleras. Esto puede hacer al cockpit incómodo forzando tus rodillas a una posición más baja, por lo tanto más recta y de  estar más juntas también. Esto en si mismo, no es un problema pero la mayoría de nosotros encontramos esta posición de sentados un poco torpe y limitante de la performance de la remada.


ALTURA DE LA PARTE TRASERA DEL COCKPIT:

La altura del canto del cockpit detrás tuyo puede ser crítica si usas un roll de cubierta trasera. Algunos cockpit tienen cantos muy altos y mientras éstos pueden ser usados como un descanso adicional, puede también causar un montón de problemas ya que estás forzado a una posición hacia adelante en un roll dinámico.
Con un borde bajo atrás es posible tirarse hacia atrás para el rolido, pero si es demasiado bajo entonces el agua puede juntarse y filtrarse a través de tu pollera dentro de tu ropa  y constantemente terminás con la zona de los riñones fría y húmeda.

ANCHO / MANGA:

Con los kayaks más grandes hay una alta posibilidad de que tengas que usar una pala más larga para alcanzar el agua. Esto en sí mismo no es un problema, pero más largo significa más pesado y más pesado significa más trabajo. Si el kayak es muy ancho, cualquier palada hacia adelante que hagas automáticamente se convertirá en una palada para virar, debido a que la hoja está más distante de la línea central del bote. Vas a terminar haciendo una serie de remadas en barrido que van a hacer que el kayak menee en su paso por el agua.

No existe kayak que  vaya a navegar en una absoluta línea recta, pero limitando la cantidad de rotación de lado a lado que introducimos, nos hacemos mucho más eficientes. 
Un kayak más ancho probablemente tendrá un asiento ancho. Esto significa que: o tenés una parte posterior más amplia o , con un sentido más práctico,  vas a aplicar algo de relleno a los lados del asiento. Este relleno debería asegurarte un calce más ajustado pero no muy apretado. Vas a desear “sentir” el kayak a través de tus caderas siempre pero no estar completamente restringido por éste.

Hay una escuela de pensamiento que recomienda tener un calce  muy flojo. Esto te permite moverte más dentro del interior del área del cockpit  pero obviamente te da menos contacto con el bote. Imaginate, con el kayak girando siempre hacia el viento en un cruce largo,  de ser  capaz de mover tu peso corporal hacia un lado para inducir una escora. Esto resultaría en que no estés obligado a remar continuamente de un sólo lado y reduciría la fatiga de sostener o trabar tu rodilla bajo cubierta. Sin embargo, haría cualquiera de las destrezas de más alta performance más difíciles debido a que tendrías menos asidero del kayak.



ALTURA DE LA CUBIERTA  DE PROA:

Un kayak más grande implica una cubierta más alta, lo que significa un movimiento de remo más alto también. Mientras este movimiento alto no es malo, puede ser difícil ajustarse a él, ya que especialmente tus hombros tendrán que hacer bastante más trabajo que el que harían con una cubierta más baja. Hay también más chances de golpear tus manos en la cubierta u otras piezas de equipo localizado allí. Si el kayak es particularmente grande en relación a tu tamaño, la cantidad de kayak que esté arriba o sobre el agua se verá afectada por el viento hasta hacer casi imposible remar en cualquier cosa que no sea una brisa suave.

TAMAÑO DEL COCKPIT:

Algunos palistas usan el cockpit más pequeño de estilo oceánico creyendo firmemente que tienen más seguridad y mejor control del kayak. Sin embargo con la idea que los fabricantes han instalado del calce en un cockpit estilo “ojo de cerradura” más grande, estos argumentos caen.
La elección en último término es tuya, ambos tienen beneficios e inconvenientes.


El cockpit oceánico es mas difícil para ingresar y salir en apuros. Si tenés pies grandes y piernas largas, probablemente tendrás que usar tu pala de soporte. Sin embargo si, como yo, tu vista se está poniendo más mala con los años, el beneficio de tener tus cartas más cerca no puede ser subestimado. También es posible tener mucho más equipo en tu cubierta delantera pero esto no es necesariamente una buena idea.


Con un cockpit “ojo de cerradura” tu carta va a estar un poco más lejos a menos que tengas una pollera que tenga puntos que permitan atar cartas. Una carta en tu pollera puede ser un estorbo o impedimento pero a la vez significa que aún cuando estés fuera de tu bote tendrás todavía tu carta enganchada a vos. La ligereza o facilidad de entrar y salir de un cokckpit  "ojo de cerradura” en un apuro no debe ser subestimada. Es, para la mayoría de la gente, más fácil  sentarse en el asiento, remar lejos del lugar en el que entraste al agua y luego deslizar  tus piernas una a una y finalmente ajustar la pollera en su lugar. Achicar es también mucho más fácil, como también secar el area del cockpit con una esponja. El viejo argumento de la pollera implosionando cuando una ola rompe sobre vos está completamente descartado por la fuerza y la calidad de estiramiento de los materiales que se usan hoy en la polleras.




SKEGS:

Generalmente la mayoría de los kayaks, cuando están cargados uniformente, tenderán al viento, o sea girarán hacia éste.
Imaginate tener un elemento que puedas usar para contrarrestar este giro y liberar tus esfuerzos para ir en línea recta en vez de remar de un solo lado.
Una definición marina correcta de un skeg sería: es una aleta inmóvil en la parte trasera de un barco, y  un timón: es una hoja abisagrada verticalmente,(con un herraje articulado), montada en la parte trasera que es usada para dirigir. Sin embargo, el skeg retráctil moderno y práctico igual se ajusta a la definición.



Hace años algunos fabricantes adaptaron un skeg a sus diseños, el resultado fue que estos kayaks sólo iban a favor del viento. Esto no fue de gran utilidad a menos que ESA fuera la dirección donde querían dirigirse. Este skeg implicaba también que la carga, o la distribución del kayak tenía que ser la correcta.

Una aleta variable fue entonces diseñada  y ésta podía ser desplegada desde el cockpit por una variedad de formas. Rápidamente conocido como Skeg Retráctil, la mayoría de los sistemas usa un cable trenzado de acero inoxidable para tironear el skeg hacia arriba en descanso, lo que es bueno. Estos sistemas también usan el mismo cable para empujar el skeg a la posición de desplegado. Esto es similar a colocar un pedazo de soga en el suelo y tratar de empujarla. La soga se va a arrugar o plegar y también lo hará el cable de control del skeg contra toda resistencia.
Los skegs retráctiles han sido hoy adaptados a la mayoría de los kayaks de mar en el Reino Unido, en general no son diseñados con el kayak pero adaptados casi siempre como algo posterior.

El propósito de un skeg retráctil es dirigir el kayak de acuerdo a las condiciones. Algunos sistemas han sido tan desarrollados y avanzados que necesitarías un grado en metalúrgica con un extra de ingeniería aeronáutica como así también hidráulica, sólo para desentrañar qué está ocurriendo.
 Idealmente cualquier método de despliegue que se use debe ser efectivamente mantenido por cualquier palista de aptitudes mecánicas limitadas ( en una expedición es sensato tener un cable extra junto con las herramientas necesarias para llevar a cabo una reparación).

Como en el caso de cualquier chico que empieza a conducir, el control del skeg es usado como un interruptor de encendido-apagado en la misma forma que el pedal del acelerador. Toma un poco de tiempo acostumbrarse a aplicar el grado de skeg. Dicho esto, la posición general de un skeg retractil será:
-abajo para ir a favor del viento; 
-arriba para ir contra el viento;     
-algún punto entre arriba y abajo cuando el viento está viniendo de costado o de lado. Tal vez una mejor forma de entender la posición es empujar el control hasta donde el viento empieza a venir relativamente de frente.



TIMONES:

Los timones cuando son adaptados a los kayaks de mar son una pieza de equipo de la cual se hace abuso frecuentemente; la mayoría de los palistas los usan como el elemento principal de giro en vez de utilizar su habilidad como palista. Un timón provee un medio adicional de girar un kayak, como también un rumbo adicional, como el skeg. 
Sin embargo un timón  usualmente va a impedir un giro muy cerrado con el kayak bien escorado, y en un mar agitado el timón puede pasar la misma cantidad de tiempo fuera del agua como dentro.  Además la  numerosa cantidad de partes de un timón, desde el reposapiés o pedalera hasta el herraje, están propensos al daño y requieren mantenimiento. 



Algunos kayaks son diseñados con el uso de un timón en mente (a menudo los kayaks de carrera, que permiten al palista concentrarse más completamente en hacer que el kayak vaya hacia adelante que en dirigirlo con la pala), pero la mayoría de los kayaks van a desempeñarse mejor con la aplicación de un uso sofisticado de la pala en vez del timón. Como con un skeg retráctil, lo simple es lo mejor, y recorda llevar partes extras siempre con vos. Un cable de control extra podría ahorrar un gran pesar en cualquier salida de más de dos horas.

jueves, 2 de junio de 2011

El yámana siempre por dentro





Siempre he dicho que el camino del kayakista es algo muy personal, totalmente particular. Por más que no estamos hablando de una actividad que no esté estandarizada o fundamentada en lo técnico, siempre finalmente la elección será en último término muy de cada uno.

Es personal supongo, porque se conecta con una parte del ser, bastante escondida, una puerta que abrimos sin querer al sentarnos y salir al agua, mas allá del “deporte”, o de la actividad que nos están vendiendo en estos tiempos, o de la inquietud que nos llevó allí, a ese momento.

Hay como una sensación de propiedad de la actividad, donde cada remero o kayakista  se autodefine, intercambiando lo físico con lo espiritual, para decidir hasta donde se extiende en este camino.
 Lo físico, para ver qué toma en cuanto a la perfección o destreza de las técnicas para desempeñarse en la embarcación,  y lo espiritual porque muchas veces la motivación viene de lugares tan internos que ni siquiera se puede explicar por qué la pasión, la obsesión, de conectar con la pureza de lo técnico, y se busca sin equívoco otra interacción tal vez, la “danza” holística cuando se siente que llegó el momento, de llevar esto más allá.

Esa inquietud será tan personal como el hombre o mujer que se adentre en las aras de esta actividad sin saber a dónde se dirige exactamente. Tan particular será su camino devenido de su temperamento, o fines; habrá un propio camino con el tiempo, habrá un perfil o sendero en la actividad del kayak donde cada uno decidirá  tocar su umbral en tal o cual punto.

Tan particular como la sensación de estabilidad en el bote, serán las derivaciones de esto.

Porque, como siempre digo el kayak prende, muchas veces te lleva por el camino de la pasión, y te encontrás elucubrando expediciones, sueños de kayakista explorador, con la ansiedad de que éste te lleve más lejos, más adentro aún… de ese viaje espiritual que en definitiva todos libamos, sentimos en menor o mayor medida.

Hoy deseo confesar, que en este camino que jamás imaginé, conviven dos kayakistas todo el tiempo. Cuanto más me involucro con lo que yo entiendo como los métodos para mejorar lo técnico y expandir mis habilidades hoy, más consciente soy de por qué remo, qué clase de remero me siento, qué espíritu convive dentro mío, con qué sentimiento interactúo con mi medio.

La esencia es siempre la misma. Soy el ser que se mete al agua en el que siente su medio,  su Tierra del Fuego. Un ser que, a pesar de vivir en la era moderna donde los materiales, las embarcaciones, los equipos y la cercanía con toda clase de información abre una diferente perspectiva de todo, busca la simpleza, rusticidad y pureza de la interacción con su hogar, su mundo, su momento en el agua. Ese ser es el que se embarca conmigo toda vez que me siento en la embarcación y ando por ahí en las aguas fueguinas.

 Hay un espíritu puro que siempre va en el bote, que sabe conectarse con su mundo, no  importa en qué modelo llegue a tocar tierra. Si su embarcación la construyó en este caso con manos propias. Si va a durar de 1 a 2 años, si va a necesitar en tierra mantenerse húmeda para ser calafateada o no. Si el remero hoy porta una certificación que estandarice su conocimiento o competencia o debió pasar un rito de iniciación para ser adulto, cuánto pasó para que lograra conocer y navegar las aguas para hoy transportar a toda una familia a cargo.
No importa qué clase de comida lleve a bordo o si debe proveérsela arponeando un lobo, o largando su perro a cazar una nueva nutria… No son tantas las diferencias, porque siento que hay algo que nos une muy fuerte, una energía que conecta todo. Viene como una suave brisa y me envuelve. Y esa delicia siempre se instala cuando navego.

Ese espíritu tal vez sea la precisa respuesta a tantas preguntas,  por qué sigo remando, por qué esta pasión de remar en Tierra del Fuego, por qué deseo remar mejor, ser diestra en mi embarcación, desenvolverme bien en las que siento mis aguas. Por qué deseo llevar esto más allá, como si no pudiera bajarme del bote aún cuando ya estoy en tierra. Como si pasara la mayor parte de mi tiempo embarcada.

Es como si el espíritu en el agua me reclamara, por momentos, que nos tornáramos uno y el pudiera remar en mí, y yo humildemente pudiera regocijarme en su esencia, su poder, su sabiduría, su sentido de pertenencia hasta el día de su muerte física con su vida de navegante.
Es como si los dos sólo nos dedicáramos a vivir con todos nuestros sentidos nuestro lugar, sin la necesidad de demostrar pericia, en el anfiteatro de los que observan.
Es como si sólo buscáramos otra vez en forma consciente algo que ningún papel le puede dar a un kayakista hoy. Algo que viene de más allá en el tiempo, la espontánea experiencia de no navegar por ningún premio, ni evaluación, sólo por conectar y sentir un poquito la dicha del todo.

 Esa sensación deliciosa que debe haber sentido el yámana cuando olía la humedad de su canal Onachaga a punto de llover. Sentir en la espalda el viento que se levanta y cambia de cuajo los planes en el agua, instala otra sensación nítida, de que aquí nunca está dicha la última palabra. De que llegó el momento de buscar un recodo, un rincón donde guarecerse y preparar el fuego, para ahora llevar la magia a tierra, en el interactuar  con el medio sin arrogancias, ni falsos temores, estar a la altura de Tierra del Fuego en el sentirla. No el combatirla, ni el tratar de ganarla.

Entender y rendirse ante este sabor delicioso y placentero que es adictivo. El espíritu, el bote, el medio y el fuego en tierra, nuestro mundo está completo. Nuestra alma es acariciada por algo más allá de las palabras.



Navegar por el sólo placer de sentir esta inmensa dicha, que trasciende eras, porque las almas son las mismas…

 Moni